Entre camping salvaje y el juego de la oca

Las imágenes no representan las tiendas de campaña en las que viven muchos SDF’s (sin domicilio fijo) ni los “sin papeles” haciendo fila, al frente de la Oficina de Extranjería, en busca de una improbable legalización de su situación. Se trataba esta semana de padres de familia relativamente pudientes que no querían perder el cupo de sus párvulos para el primer año de bachillerato en los colegios francófonos de Bruselas y Valonia. La aplicación de un decreto que obligaba este viernes a los colegios a inscribir a los alumnos que primero se presenten, generó una curiosa ola de ‘camping salvaje’ a la entrada de las escuelas de cierta reputación.
Tema de discusión en los medios y entre las personas de mi entorno. La medida, preconizada por la Ministra socialista de Educación, tiene un objetivo loable, asegurar una mezcla de estudiantes de orígenes sociales diferentes, pero su impacto sobre los problemas de la educación, como la deserción escolar y los discretos resultados estudiantiles a nivel europeo, nos parece más bien magro.
Por otro lado, me temo que primero se me va ‘acabar la cuerda’ escribiendo en este blog antes de que los políticos belgas se decidan a formar un gobierno. Como en el parqués o en el juego de la oca, de regreso al punto de partida. Ruptura entre los negociadores y renuncia del formador nombrado por el Rey. Decepción de los ciudadanos que habíamos creído que San Nicolás (quien trae los regalos a los niños este 6 de diciembre) nos iba a regalar un nuevo gobierno para que por fin pasásemos a hablar de otra cosa.
Las fotos son del blog del VLAN