El cumpleaños de este cuaderno es una buena época para hacer inventario. Y cuando digo inventario me refiero a los activos y pasivos de este ejercicio que empecé hace doce meses. Cómo era antes mi vida sin los blogs? Si en el 2006, “You” era el personaje del año para Time Magazine, el 2007 fue para las redes sociales.
Pasar de utilizar Internet para consultar el correo y buscar consejos sobre cosas que comprar a interesarme en ser actor, testigo y difusor de información. Menudo cambio! Y qué decir de los nuevos lazos sociales creados a través de la blogósfera?
Hoy día puedo participar en una discusión, dar mi opinión, difundir información, contar mis pequeñas historias o exorcizar algunos de mis demonios. De igual manera puedo ser desde periodista ciudadano hasta paparazzo delator.
Porque si hay un lado oscuro donde se presentan abusos, el Internet es también una herramienta de conocimiento, trabajo y contacto por excelencia.
Sin duda, y aunque suena lógico para los convertidos, los de mi generación sí podemos quedarnos afuera de todo esto pero no debemos seguir pensando que todo tiempo pasado fue mejor. Es como “sacarle el cuerpo” a nuestra responsabilidad de afrontar los ajustes que exige el cambio.
Me gustaría nombrar a cada uno de los que me han acompañado durante esta etapa, lectores y comentaristas asiduos u ocasionales. Quisiera hacer referencia a algunos mentores pero una lista alargaría esta entrada. Que todos se reconozcan entonces en estas líneas. Han sido el combustible sin el cual hace tiempo hubiésemos cerrado.
No me arrepiento del tiempo invertido, de haberme ‘despegado’ de la TV y acostado más tarde. Parece obvio escribirlo pero al leerlos descubro al otro lado de la pantalla seres imperfectamente humanos desprovistos de todas esas convenciones sociales. Esas relaciones virtuales que se mantienen, vía los blogs, parecen flacas y efímeras pero llegado el caso son capaces de atravesar las pantallas y entrar en nuestro mundo real.
Escribiendo aquí no sólo descubrí acerca de la blogósfera sino también acerca de mi mismo.
Releyéndome me doy cuenta de mis gustos, de las cosas que me estremecen o emocionan y de aquellas contra las que quisiera sublevarme. Igualmente, me percato del valor de saber leer que es como el saber escuchar. Hay tantos blogs por descubrir que quiero dejar aquí por un tiempo y dedicarme a conversar con Uds. Seguimos entonces “conectados”.
PD: Cuál cree Ud. que ha sido el post más leído (visitado) de este cuaderno o simplemente el que llamó más su atención?