Google defiende mi libertad

Cuantos defensores de los derechos humanos en la vida off-line (de acuerdo ya entendí que no hay diferencia entre vida real y virtual) pagan con su persona por defender la libertad de expresión y uno sentado al frente de su computador escribiendo bobadas, en pantuflas y en piyama, pensando en que uno de esos desadaptados me estaría violando la mía al borrarme el blog. Si, señores juristas, es mi libertad de expresión también pero una cosa de esas prefiero llamarla por ahora ‘robo de juguete’. Cuantos no dan su vida y solo tienen una. Yo puedo volver a abrir este chuzo las veces que quiera. Porque los señores de Google, grandes defensores de las libertades, me regalan otro. Eso sí con tal de que escriba posts a menudo (para aumentar el trafico Internet), que siga visitando otros blogs si es posible con pop-ups de propaganda y que me autosatisfaga mirando mis estadísticas.
Me llama más la atención protestar y contribuir al pago de un abogado – aunque qué legislación existe en Colombia para proteger al usuario de Internet? - a una víctima que escribe, da su nombre, pone su foto, dice donde vive, donde trabaja, es activo en su profesión y está comprometida con una causa en la vida off-line y mantiene una vida on-line igual de rica.
Para los que el blog es solo una vitrina de los vaivenes del ego, de donde acá se nos convirtió en el único ejercicio de nuestra libertad de expresión? Salgamos a la calle, hablemos con la gente, visitemos un barrio desfavorecido en donde a lo mejor nunca habrán oído hablar de blogs, abracemos una causa, comprometámonos con algo. Atrevámonos a trascender!
Me quito el sombrero pues delante de los blogueros implicados en las dos vidas y que habiendo perdido su blog vuelven a empezar ojala puedan denunciar, encontrar, encarcelar a los culpables y aquellos a quienes se los borraron o les da miedo que se los borren, y que como nosotros, solo se mueven anónimos detrás de sus pantallas pues pilas con dar sus contraseñas por ahí sin verificar. Si queremos seguir divirtiéndonos echando chistes y platicando light, hagamos nuestros back-ups y dejemos de darnos golpes de pecho. Igual hay público para todos.